Un Mystique Determinado son ocho canciones escritas por Manolo y Genís (Astrud) para un vídeo de Carles Congost de veinte minutos que lleva el mismo título. El vídeo cuenta la historia de un deportista que, bajo la influencia de un cierto mystique, decide cambiar su vida y hacerse vídeoartista. Carles Congost propuso a Astrud colaborar en este vídeo, ya que tenía la idea de que fuera musical. Se reunieron varias veces para comentar el guión y concretar cuántas canciones se necesitaban y de qué iban a tratar las letras. Al final, Manolo y Genís escribieron ocho canciones, y buscaron las voces y los músicos que más se adecuaban a cada tema.

En el vídeo aparecen, además del protagonista, su ex-novia, sus padres, su entrenador, sus compañeros de equipo, un trío de chicas (las Mystique), una crítica de arte y un artista español de los setenta. Todos dan su versión de los hechos, de ese cambio, y de lo que puede ser ese mystique (algunos lo hacen cantando). Para las voces de estos personajes-cantantes, Manolo y Genís contaron con la colaboración de Desirée de Fine!, de Carlos Ballesteros, del tenor Javvy Born y de Helena de Feria. También contaron con un cuarteto de cuerda para el tema Soy futbolista y para la suite que cierra el vídeo.

El resultado musical es muy variado; el disco empieza con una versión del tema de Hidrogenesse Un mystique determinado, que da título a la obra de Carles Congost, interpretada por las Mystique, que vienen a ser como grupo de chicas de los sesenta producidas con una caja de ritmos hip-hop old school. El artista español de los setenta interpreta una especie de canción protesta con un toque gospel. La ex-novia canta acompañada de guitarra acústica y flautas, como una cantautora americana. El videoartista protagoniza los dos momentos estelares del disco: la balada Soy futbolista, que es preciosa, y el hit pop de baile No tengo miedo.

El disco incluye además tres remezclas: Madelman ha hecho una remezcla de No teno miedo, sofisticada y punchera a la vez. The Congosound (el grupo musical de Carles Congost y Vicent Fibla) le han dado a la canción Ya estoy mejor de la ex-novia un giro hedonista, y Austrohúngaro le da a la versión de Un mystique determinado otra vuelta de tuerca.